Espagueti a la boloñesa
36
votospersonas 10 min.
de preparación 25 min.
de cocción
Qué me aporta esta receta...
Información nutricional
Esta receta me aporta...
Grasas | 153 Kcal | 17 gr. | 26% |
---|---|---|---|
Hidratos | 277 Kcal | 69 gr. | 48% |
Proteínas | 124 Kcal | 31 gr. | 26% |
Información nutricional adicional por ración:
Azúcares | 14,30 gr. |
---|---|
Fibra | 7,40 gr. |
Grasas saturadas | 3,80 gr. |
Sal | 1,12 gr. |
Si hablamos de cocina fácil y rica, ¡pocos platos pueden superar a los espagueti a la boloñesa! Este plato, básico en la lista de recetas de cualquier estudiante o joven recién emancipado, es uno de los más famosos entre las muchas creaciones geniales que la cocina italiana ha regalado al mundo, ideal para cualquier ocasión. Vamos allá con este plato de espagueti a la boloñesa.
Considerada uno de los grandes emblemas de la cocina italiana, la receta de la salsa boloñesa fue registrada en 1982 en la Cámara de Comercio, Industria, Artesanía y Agricultura de Bolonia para garantizar la conservación de la receta original. Sus orígenes, sin embargo, son difíciles de precisar, aunque la mayoría de los expertos en cocina los sitúan en la antigua Roma y para muchos, esta salsa es una variante del “ragoût” francés que llegó a Bolonia gracias a los estudiantes y profesores universitarios.
Sea como fuere, hoy los espagueti a la boloñesa se han convertido en uno de los platos italianos más populares en todo el mundo, aunque en el país transalpino prefieren acompañar esta salsa con tagliatelle. ¿Quieres conocer más sobre los orígenes y la historia de esta receta? Más abajo te explicamos en detalle cuándo, dónde y cómo nacieron los espagueti a la boloñesa y te damos las claves para triunfar preparándolos.
Ingredientes
- 350 g de Tomate frito estilo casero SOLÍS
- 320 g de espaguetis
- 400 g de carne picada ternera
- 150 g de zanahoria
- 150 g de cebolla
- 100 g de apio
- 100 ml de vino tinto
- sal
- pimienta
- orégano (opcional)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
Elaboración
Pelar y picar muy fina la cebolla, la zanahoria y el apio.
Poner una cazuela con 2 cucharadas de aceite, a fuego medio-bajo, añadir las verduras y cocinar durante 12 min, removiendo de vez en cuando.
Añadir la carne picada y cocinar durante 7 min. Salpimentar y añadir orégano al gusto (opcional).
Verter el vino y dejar cocinar hasta que se evapore el alcohol, unos 2 min. Finalmente agregar el tomate frito estilo casero Solís y dejar cocinar la salsa para los espagueti a la boloñesa durante 2 min, removiendo de vez en cuando.
Hervir la pasta en abundante agua siguiendo las instrucciones del fabricante. Colar la pasta y reservar un poco de agua de la cocción, por si queda muy espesa la salsa.
Servir los espaguetis a la boloñesa.
El truco del chef
EL TRUCO DEL CHEF Se puede utilizar vino blanco en lugar de tinto. Se puede añadir bacón o panceta al sofrito. Si sobra salsa, se puede utilizar para hacer una lasaña o canelones. Servir con queso parmesano.
Consejo nutricional
Utilizar alimentos alternativos a la carne puede ayudarte a reducir el consumo de proteína animal y ser más sostenible con el planeta.
La mayoría de personas asocian los espagueti a la boloñesa a la ciudad italiana de Bolonia, situada en el norte de Italia y capital de la región de Emilia-Romagna. Esta ciudad también alberga la universidad más antigua de Europa, fundada en 1088, que convirtió a Bolonia en un referente cultural en el continente durante la Edad Media y el Renacimiento. Como ves, te traemos multitud de secretos en esta receta de espagueti a la boloñesa.
Si bien los historiadores coinciden en situar en esta ciudad la invención de la salsa boloñesa, algunos expertos no la consideran una receta tradicional italiana, sino que atribuyen su creación a antiguos romanos. Con la expansión del imperio, la receta llegó a la Galia y en la Edad Media, regresó a Italia de la mano de los estudiantes y profesores franceses que acudían a su prestigiosa universidad. Ciertamente, el “ragú”, nombre con el que se conoce a esta salsa en Italia, es muy similar al “ragoût” francés. No obstante, aunque el mérito de su creación no sea exclusivo de los italianos, ¡es innegable que estos han sabido aprovechar como nadie sus posibilidades culinarias!
Sin embargo, ¿cuál es la historia de los espaguetis a la boloñesa? ¿Dónde se encuentra el origen de este plato? El primer dato a tener en cuenta es que los espaguetis son un pasta típica del sur de Italia, mientras que Bolonia está situada al norte. Además, para los puristas, este tipo de pasta larga no es la más adecuada para una salsa fluida como la boloñesa. En su lugar, prefieren usar “tagliatelle” o “taglierini”, con forma plana, que absorben mejor la salsa así que, ¿por qué consideramos a los espagueti boloñesa un plato tradicional italiano?
Para conocer la respuesta, debemos viajar a través del Atlántico hasta llegar al continente americano, destino de miles de inmigrantes italianos durante el siglo XIX. Parece que en Estados Unidos no era fácil conseguir “tagliatelle”, así que adaptaron el plato usando la pasta que pudieron encontrar en el mercado norteamericano ¡y así nacieron los espaguetis a la boloñesa!
¿Quieres algunos trucos y consejos útiles para que este plato siempre te salga bien? Para cocer la pasta, es recomendable usar una proporción aproximada de un litro por cada 100 gramos de pasta. La sal debe añadirse cuando el agua empiece a hervir, ya que si la echamos antes tardará más en alcanzar el punto de ebullición. Para evitar que la pasta larga como los espaguetis se peguen, añade un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Si te gusta la pasta al dente, recuerda verter un vaso de agua fría cuando la retires del fuego para cortar la cocción y colar la pasta inmediatamente. Añade la salsa boloñesa a los espaguetis y ¡listos para servir! ¿Quién se va a poder resistir a esta receta de espagueti a la boloñesa?
Sabías que...
La salsa de tomate frito con la que hemos aderezado estos espagueti a la boloñesa es un clásico en la gastronomía tradicional, pero ¿sabías que actualmente también puedes encontrar en el mercado salsas de tomate “light”? Pensando en aquellos consumidores que quieren cuidar al máximo su alimentación, estas salsas sin azúcares añadidos ofrecen una alternativa muy saludable a la salsa de tomate frito tradicional, reduciendo el nivel de calorías sin renunciar a su excepcional sabor.¿Esto quiere decir que se trata de salsas 0% azúcar? Ciertamente, las salsas de tomate light siguen conteniendo la fructosa presente de forma natural en los tomates, al igual que en otras frutas. La diferencia reside en que, al estar acompañado de fibra y otros nutrientes, estos azúcares naturales se absorben de forma más rápida que otros azúcares, como la glucosa o la sacarosa. Si quieres saber más, en Nestlé Cocina te aclaramos todos los mitos sobre el tomate frito sin azúcar ni sal.
Tanto si optas por un tomate frito al estilo tradicional como si prefieres una variedad sin azúcares añadidos, los pasos a seguir para preparar una salsa de tomate frito casera como la de estos espagueti boloñesa son básicamente los mismos. Solo hay que limpiar los tomates, triturarlos y freírlos en la sartén con un buen chorro de aceite de oliva, mejor si es Virgen Extra, dejándolos cocinar a fuego lento hasta que adquieran la textura perfecta.
Este es el mismo proceso que se sigue en la industria alimentaria para elaborar el tomate frito, un básico que puede sacarte de muchos apuros cuando necesitas improvisar en la cocina. ¿Cuándo apareció la primera salsa de tomate frito en España? ¿Cuáles son sus beneficios nutricionales? En nuestro blog podrás descubrir la respuesta a estas preguntas, además de otros muchos más secretos y curiosidades del tomate Solís.