Descúbrelo todo sobre las semillas de chía: qué son, preparación y cómo tomarlas
29/10/2021¿QUÉ ES LA CHÍA?
Seguramente has oído hablar de las semillas de chía en los últimos años. Y no es de extrañar porque su consumo se ha disparado y es, junto a otros alimentos como el kale, la quínoa, la maca o el ajo negro, uno de los alimentos de tendencia en las cocinas actuales, todo gracias a sus propiedades nutricionales y su funcionalidad en la cocina.
Las semillas de chía provienen del fruto de una planta herbácea originaria de zonas montañosas de Centroamérica llamada Salvia hispánica. Antiguamente era unos de los cuatro granos más importantes y, por ejemplo, se requería como tributo a los pueblos conquistadores. Por tanto, no se trata de un alimento nuevo, las culturas centroamericanas precolombinas ya conocían sus beneficios, y fue la introducción del cultivo de cereales por parte de los conquistadores europeos, los que desplazaron su consumo.
Continúa leyendo si quieres saber más sobre una de las semillas más utilizada por mayas y aztecas ¿qué nos aportan? ¿Cuánto es recomendable consumir? ¿Necesitas recetas con chía? ¿Semillas de chía cómo consumirlas?
¿SON TAN BUENAS LAS SEMILLAS DE CHÍA?
Las semillas son un grupo de alimento ricos en fibra, proteínas, vitaminas y minerales, y aunque se consumen en cantidades pequeñas, es recomendables incluirlas en nuestras recetas diarias para aprovechar al máximo sus propiedades nutricionales.
La chía destaca entre las semillas por su alto contenido en ácido graso omega 3 y diferentes oligoelementos como calcio, magnesio, cobre y zinc. También son ricas en proteínas, hierro y antioxidantes. Justamente son estos nutrientes los que la hacen especialmente interesantes en dietas vegetariana, veganas y pautas alimentarias para deportistas.
¿Y para que se usa la chía en la cocina? Pues entre otras cosas, aportan textura gelatinosa a las preparaciones. Están recubiertas por una fibra gelatinosa (mucílago) que se desarrolla al remojarla y favorece el control de los niveles de colesterol en sangre, así como la regulación del tránsito intestinal. Precisamente la fibra de la chía es la responsable de que este alimento pueda absorber hasta 15 veces más de agua que el peso de la propia semilla. Esta es la razón por la que su consumo aumente la sensación de saciedad y, además, la hace eficaz en la prevención del estreñimiento.
Sin embargo, aunque son múltiples las propiedades nutricionales es un error atribuirle propiedades “milagrosas” que la hagan imprescindible dentro de una alimentación saludable, o que remplacen el consumo de otras semillas autóctonas como las de girasol, calabaza o lino.
¿CUÁNTA CANTIDAD DEBEMOS TOMAR?
Junto a una alimentación equilibrada y variada, y un estilo de vida saludable, una o dos cucharadas de esta semilla a lo largo del día (25 g) es suficiente para que nuestro organismo aproveche todas las propiedades nutricionales. A pesar de lo que pueda parecer, ingerir más cantidad no hará que consigamos más beneficios para nuestra salud. De hecho, puede ocurrir lo contrario. Un exceso podría causar problemas intestinales como inflamación y dificultad para absorber nutrientes, especialmente del hierro y el calcio presentes en la misma semilla.
¡PONGÁMONOS A COCINAR CHÍA!
Son igual de versátiles en preparaciones saladas como dulces. Y puedes consumirlas molidas o enteras. Si decides optar por la primera opción, puedes utilizar un mortero, un molinillo o un procesador de alimentos para ayudarte. No te preocupes si no quedan muy finas, no es necesario un molido extremadamente potente. Después, incorpóralas en preparaciones ricas en agua como batidos, zumos o yogur líquido, aportando un extra de proteínas y oligoelementos que enriquecerán desayunos y meriendas. Si en cambio prefieres consumirlas enteras, deberás ser más previsor ya que es recomendable ponerlas en remojo en agua fría (1-2 horas) o en agua caliente (alrededor de 15minutos sin hervir). Dejarlas en remojo toda una noche con agua en la nevera es ideal para garantizar que absorben la mayor cantidad de agua posible. Pasado este tiempo el resultado es una gelatina que puedes incluir en sopas, yogures, tartas, salsas, … y que, además, puedes guardar en la nevera durante varios días. También puedes espolvorearlas directamente en ensaladas para darle un toque crujiente, en salsa, guisos, helados o en bizcochos y panes como suplemento en tu receta tradicional. Eso sí, a nuestro cuerpo le costará más digerirlas.
Aunque ya hemos visto que hay diferentes maneras de consumirlas, si prefieres tomarlas sin hidratar, molidas es la mejor opción ya que facilita que nuestro organismo aproveche todos los nutrientes.
Aunque es menos frecuente, también podemos encontrar formatos distintos como la harina de chía, especialmente utilizado en recetas dulces, o el aceite de chía, especialmente comercializado como suplemento nutricional. Hay que tener en cuenta que algunas propiedades nutricionales como la fibra se pierden con estas variedades.
La utilices como la utilices, las semillas de chía no alteran ni el sabor ni el color de los platos ¡Una gran ventaja!
COCINA CON NESTLÉ COCINA Y SEMILLAS DE CHÍA
Es normal que nos falten ideas y recetas con chía para utilizar estas semillas en casa, al fin al cabo, es un alimento con poca tradición culinaria en Europa. Por suerte, Nestlé Cocina nos ofrece opciones de recetas con semillas de chía, actuales y fáciles, y que utilizan estas semillas para mejorar el aporte nutricional de las recetas. ¡Vamos a conocerlas!
Una vez pruebes el bizcocho de leche condensada con chía y naranja te costará cambiar de elección. Solamente con 7 ingredientes básicos en las despensas de la mayoría de los hogares, 20 gramos de chía y 5 minutos de preparación, tendrás listo este delicioso bizcocho para preparar desayunos con chía.
Si quieres preparar desayunos variados y salir de la monotonía de las tostadas, el pudin de chía, yogur, avena y frutos secos es tu receta . Otra opción lista en cinco minutos con la que el tiempo dejará de ser un inconveniente para cocinar.
Y, por último, si lo que te ronda por la cabeza es una opción refrescante para opciones especiales, entra en la cocina y ponte manos a la obra con uno de los postres de chía más fresquitos, polos de chía, frambuesa y leche condensada.