Bizcocho: Precalentar el horno a 180º.
Fundir la tableta de chocolate negro 70% al baño maría o microondas y reservar.
Batir la mantequilla con 175 g de azúcar.
Incorporar los huevos de uno en uno e ir batiendo.
Mezclar la harina tamizada con la levadura y una pizca de sal. Añadir a la preparación anterior y batir hasta que esté todo integrado.
Añadir el chocolate fundido y el yogur. Mezclar hasta integrar.
Verter la preparación en un molde de 20 cm forrado con papel de horno.
Alisar con una lengua y hornear unos 45-50 minutos.
Retirar del horno. Quitar el aro del molde y dejar enfriar encima de una rejilla
Virutas: Picar con el cuchillo a trocitos no muy pequeños 50 g de chocolate Negro y refrigerar.
Tejas: Fundir 50 g de chocolate Negro NESTLÉ Postres. Verter en una manga pastelera sin boquilla.
Sobre acetato dibujar 18 círculos de forma ovalada de unos 2,5 x 4 cm aproximadamente.
Colocar el acetato sobre un rodillo de cocina. Para que no se mueva, enganchar el acetato al rodillo con cinta adhesiva.
Llevar al frigorífico hasta que el chocolate se solidifique. Para que el rodillo no se mueva, colocar encima de papel de cocina.
Repetir la operación hasta acabar con el chocolate (3 veces). Para no tener que esperar a que se enfríen las tejas, puede hacerse con un rodillo y rollos de papel film, papel de aluminio, etc. Así pueden ponerse los tres a la vez a refrigerar. Puede hacerse el día anterior a montar la tarta.
Cerezas con chocolate blanco.
Despegar las tejas del acetato y dejar con la curva hacía arriba.
Fundir el chocolate blanco al baño maría o microondas. Sumergir las 18 cerezas en el chocolate blanco, dejando un poco la parte roja de arriba. Colocar cada una de ellas sobre las tejas de chocolate y refrigerar. Con esta cantidad de chocolate, sobrará un poco, pero es más fácil de sumergirlas.
Preparar el relleno: Quitar el hueso a los 400 g de cerezas y cortar en cuartos.
Ponerlas en un cazo a cocer con los 65 g de azúcar y llevar a ebullición. Dejar cocer unos 15-20 min a fuego medio, removiendo de vez en cuando. Dejar enfriar. Puede prepararse el día anterior.
Montar la nata. Cuando esté semi montada, añadir la esencia de vainilla y el azúcar glas y seguir batiendo hasta que esté bien montada. Colocar la nata en una manga pastelera sin boquilla. Reservar un poco de nata para hacer los 18 rosetones finales poniéndola en otra manga pastelera con boquilla rizada. Refrigerar ambas mangas pasteleras.
Montaje de la tarta: Colar las cerezas y reservar el almíbar. Dividir en dos las cerezas.
Cortar con un cuchillo de sierra la parte superior para quitar la montañita.
Cortar el bizcocho en tres discos. Antes de separarlos, colocar un palillo en cada uno de ellos, uno encima del otro en la misma posición, así al montar la tarta estarán los tres discos en la misma posición.
Con un pincel retirar las migas del bizcocho. La parte de abajo del bizcocho que es la más plana será el disco que se colocará en la parte de arriba de la tarta.
Colocar el primer disco sobre un plato giratorio (si tenemos). Pinchar el bizcocho con un tenedor y pincelar con almíbar. Repartir la mitad de las cerezas.
Cubrir un con una capa de nata montada y alisar con una espátula. Colocar el siguiente disco de bizcocho, alineado con el otro con la posición del palillo.
Repetir la operación con el almíbar, las cerezas y la nata montada.
Colocar encima el último disco de bizcocho, pincelado también con el almíbar.
Con la manga pastelera, cubrir la tarta, los laterales y la parte de arriba. Alisar con una espátula dejándola lo más fina posible.
Colocar la tarta sobre una rejilla y debajo una bandeja. Repartir por la parte de debajo de la tarta las virutas de chocolate, ayudándonos de la mano (mejor usar guantes). Ir recogiendo las virutas y volver a ir repartiendo. Repartir también algunas virutas por encima de la tarta.
Hacer los rosetones con la nata montada reservada en la manga con boquilla rizada. Refrigerar la tarta unas 2-3 horas para que la nata coja consistencia.
Colocar encima de cada rosetón de nata las tejas de chocolate con las cerezas en el momento de servir.
EL TRUCO DEL CHEF
Se puede añadir Kirsch en la cocción de las cerezas o al finalizar la cocción. Es una tarta laboriosa, pero que algunos pasos pueden preparase el día anterior. Si no tenemos acetato, puede hacerse con papel de horno.